Beneficios:
- Es una excelente fuente de fibra, lo que ayuda a mejorar la digestión y mantener la salud intestinal.
- Proporciona energía sostenida debido a su liberación lenta de carbohidratos, ideal para mantener niveles estables de azúcar en la sangre.
- Rico en vitaminas del complejo B, como B1, B3 y B6, que son esenciales para el metabolismo y el sistema nervioso.
- Contiene minerales como magnesio y fósforo, que contribuyen a la salud ósea y muscular.
- Bajo en grasas, lo que lo convierte en una opción saludable para dietas equilibradas.
El arroz integral Yamaní tarda más en cocinarse que el arroz blanco debido a su capa externa de salvado, que conserva más nutrientes y fibra. Aquí te dejo un método de cocción sencillo:
Método de cocción:
- Enjuague: Antes de cocinar, enjuaga el arroz bajo agua fría para eliminar impurezas.
- Proporción agua/arroz: Utiliza 2 ½ o 3 partes de agua por 1 parte de arroz.
- Cocción:
- Coloca el arroz y el agua en una olla.
- Lleva a ebullición a fuego alto.
- Cuando hierva, reduce el fuego a bajo, tapa la olla y cocina a fuego lento por unos 35-45 minutos, o hasta que el agua se haya absorbido por completo.
- Reposo: Una vez cocido, apaga el fuego y deja reposar el arroz tapado durante 5-10 minutos para que termine de absorber el vapor.
- Listo para servir: Remueve con un tenedor para separar los granos y sirve.
El arroz integral Yamaní tiene una textura más firme y un sabor más nutty que el arroz blanco, haciéndolo perfecto para acompañar comidas saludables.
Usos:
- Se puede utilizar en ensaladas, como base para platos principales, o acompañamientos.
- Es ideal para sopas, guisos y preparaciones vegetarianas o veganas.
- Se combina bien con verduras, legumbres y proteínas para crear comidas completas y balanceadas.
Tabla nutricional (por 100 g de arroz crudo):
- Calorías: 370 kcal
- Carbohidratos: 77 g
- Proteínas: 8 g
- Grasas: 2.5 g
- Fibra: 3.5 g
- Hierro: 1.2 mg
- Magnesio: 110 mg
- Fósforo: 300 mg